miércoles, 16 de enero de 2008

El Chiflón del Diablo...Subterra...Subdignidad


Fuí a Lota, una zona de minas subterráneas de carbón y entré al "Chiflón del Diablo". Es una mina a 140 metros por debajo del nivel del mar y de 550 metros de longitud mar adentro, donde antiguamente se obtenia carbón en grandes cantidades, permitiendo que esta región fuera una de las más prolíficas de Chile.

Una vez se descubrieron las minas de carbón a tajo abierto, es decir que no son subterráneas, en Colombia y Venezuela, el carbón chileno dejó de ser competitivo en el mercado y las minas cerraron para siempre, dejando a los pobladores sumidos en la miseria y a las minas, abiertas sólo a los turistas que vienen entre otros a observar las locaciones de la película "Subterra" que fué filmada en este lugar.

En la mina se puede vivenciar la dificultad del trabajo de estas personas, que extraían el carbón agachados en una posición muy incómoda (pueden verme sacando carbón en las fotos), durante 12 horas diarias, siete dias a la semana, sin derecho a descanso y sin más remuneración que "fichas" intercambiables en las pulperías que pertenecían a los mismos dueños de las minas... Negocio redondo!

Sólo hombres podían trabajar e incluso entrar en la mina. Los que tenían hijos pequeños los enseñaban desde los 7 años a trabajar, por si un dían enfermaba el padre, el hijo asumiera su trabajo y la familia no fuese expulsada del pueblo, en el que solo podían vivir las familias de mineros. Si una familia sólo tenía hijas mujeres estaba condenada al hambre y al destierro una vez faltara el padre.

Los propietarios de las minas que antes explotaban a los obreros, incluso a niños desde los 7 años, exponiéndolos a peligros increíbles como los famosos corredores de fuego, hoy en día no se preocupan por la suerte que corren los ex-mineros que hoy no tienen trabajo y nunca aprendieron a hacer nada diferente de sacar carbón.

Para quienes no conozcan el término (como yo, antes de llegar a la mina), los corredores de fuego eran niños pequeños (entre 7 y 9 años) que eran enviados a detectar la presencia de gas metano en el interior de la mina. Había dos razones para que fueran de esa edad. La primera era que su tamaño les permitía estar cerca del gas que se acumula a ras de suelo y la segunda que sus vocecitas agudas les permitían gritar sin correr el riesgo de causar un derrumba el interior de la mina.

Los niños eran envueltos en sacos húmedos y se les daba una antorcha con la cual debían ir buscando el gas. Cuando lo encontraban, este explotaba, así que debían gritar: "Grisú", para advertir a los mineros y arrojarse al suelo cubiertos por los sacos húmedos que los protegian del fuego causado por el gas y la antorcha. Como se pueden imaginar no siempre corrían con suerte.

Luego de la llegada de los ingleses empezaron a usar canarios y luego loros (más fáciles de conseguir por ser nativos), que morían rápidamente cayendo de espaldas al entrar en contácto con el gas. Hoy en día los chilenos aún utilizan la expresión: "Se cayó de espalda el loro", para explicar que alguien muere.

Pedro, nuestro guía, quien perdió un brazo trabajando en la mina, no recibió indemnización ni nada parecido despues de su accidente y debe agradecer a los dueños de la mina que le permiten realizar esas visitas guiadas a cambio de las propinas de los turistas de buena voluntad.

Hoy en día los pobladores de Lota se dedican al "rebusque", es decir, trabajan en lo que pueden, viven de la caridad de los turistas, evitan usar la electricidad porque no pueden pagarla... Una situación muy particular que me ocurrió, refleja claramente la situación de estas gentes:

Debía tomar un taxi desde la mina hasta el sitio dónde estaba el bus para regresar a Concepción. Le pregunté al taxista cuanto cobraba y me dijo: "Lo que usted quiera darme patrona". Como tiene que estar uno de necesitado para no poner siquiera precio a su trabajo y considerarlo caridad?

Fué una visita muy interesante, pero muy triste. Creo que cualquier persona que reniegue en algún momento de su trabajo, deberería visitar este lugar, para darse cuenta lo que son condiciones laborales infrahumanas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

sabes me encanto tu viaje al sur por lo cual mi madre nacio y se crio un tiempo aya por motivos d trabajo voy casi todos los año aya por q tengo tios y primos y si tienes razon la jente d aya es muy umilde es rico q lota sea conosido hay muchas partes bellas